Sabemos que hoy en día contamos con una gran cantidad de fármacos que nos permiten combatir distintas enfermedades y malestares. Estos productos son elaborados y sintetizados por el hombre, pero, sus propiedades y principios activos en los que se basan a menudo proceden de propiedades de diferentes elementos presentes en la naturaleza, como animales y plantas.

En este sentido y desde la más remota antigüedad podemos destacar el uso del toronjil, siendo una planta altamente apreciada, debido a sus interesantes beneficios medicinales, especialmente en lo que se refiere a aliviar problemas digestivos y/o a provocar relajación y alivio de la ansiedad y el nerviosismo.

El toronjil puede ser empleado de múltiples maneras ya que puede ingerirse, secar las hojas o incluso hacerse infusiones con él, algo por lo general vinculado a un uso más bien medicinal, sin embargo, también es empleada para elaborar aceites asociados a usos cosméticos, para perfumar u aromatizar o para crear productos anti mosquitos o dentífricos.

Una de las propiedades más relevantes del toronjil es su efecto sedante y relajante, contribuyendo a rebajar estados de ánimo alterados o de agitación, como la depresión o la ansiedad. Asimismo, contribuye a favorecer el sueño, algo útil en casos de insomnio.

Otro de los beneficios útiles, se encuentra en su capacidad para hacer rebajar los niveles de tensión arterial, algo que puede ser de utilidad en casos de ansiedad y en personas con padecimientos de hipertensión.

Se suele emplear el toronjil para el tratamiento de las molestias de los problemas intestinales, dado que permite reducir los niveles de gases y prevenir situaciones como cólicos. También favorece la protección del hígado y la secreción de bilis (favoreciéndola).

En general suele ser un producto natural y con múltiples propiedades positivas, pero, pese a ello, hay que tener en cuenta que en algunas personas puede llegar a padecer efectos secundarios o suponer un cierto riesgo para el bienestar de quienes las emplean.

Es por ello por lo que es necesario tener especial precaución en casos de embarazo, también está contraindicada en pacientes con problemas tiroideos (especialmente hipotiroidismo), recordando que un consumo excesivo, puede llegar a generar dolores, alergias, náuseas y vómitos, por lo que hay que consumirlo con precaución, es por Salud y Más… hasta la próxim@. 

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