Gracias a las transmisiones en redes sociales, me fue posible escuchar dos discursos de la precandidada del PAN al gobierno del estado de Hidalgo, Alma Carolina Viggiano, (sí, leyó bien estimado lector, la oriunda de Tehuacán de Guerrero es la abanderada del PAN).

En sus discursos crea una narrativa que pretende alterar la realidad. Porque su construcción descansa en cuatro pistas. 

1.- Argumenta venir “desde abajo” y ser producto de la cultura del esfuerzo. Lo anterior, porque nació en una comunidad de la sierra alta en donde hoy todavía el acceso para llegar a la cabecera municipal representa una travesía.  

2.- Presume haber ganado 5 elecciones en su vida. Todas ellas sin ser la favorita y en su condición de mujer sin tener los posibles apoyos en un mundo que todavía el machismo es dominante.

3.- Dice conocer todo el Estado por las responsabilidades que ha tenido en la administración local. En particular, como Secretaria de Desarrollo Social (2002-2004) y como coordinadora de campaña en el proceso de elección a Gobernador del Estado en el 2005.

4.- Habla de que llegó el “tiempo de las mujeres”. Lo anterior, le permitirá un cierto margen de maniobra, sin embargo, desde hace tiempo es sabido que la identificación con el género se construir a través de los años, no por decreto. 

Esta falsa narrativa la podemos contrastar muy bien. Solo hay que revisar el pasado reciente de la precandidata. Esta bella historia de salir de una comunidad para conquistar el mundo, suele ser muy poderosa pero a todas luces es mentira. Viggiano pertenece a una familia con dominio político en la región. Especialmente por el lado materno de donde viene el apellido Austria. Esa referencia es una mala carta de presentación por eso la omite la hoy panista.

Es bien conocida la historia de esa familia plagada de caciques; pero para tener la última referencia solo basta remitirse al 2020, cuando en la toma de protesta de José Juan Viggiano Austria, como presidente municipal de Tepehuacán de Guerrero, se desencadenó una riña en la que varias personas resultaron heridas.

Hay testimonios de que el hermano de Carolina tuvo que hacerse de un numeroso grupo de golpeadores, para ingresar a sus oficinas. Esto luego que un grupo de personas, presuntamente simpatizantes del nuevo alcalde, atacarán a balazos, piedras y palos a un grupo de simpatizantes del Partido Nueva Alianza Hidalgo (Panalh) y disidentes del PRI, que tomaron con anticipación la presidencia municipal.

También se argumenta en el discurso que Carolina ha ganado cinco elecciones. No se especifica que varias de ellas han sido por la vía plurinominal. Como es el caso de su más reciente encargo. No sólo eso, ya que tenía la facultad de palomear nombres en esas listas nacionales se dio vuelo incluyendo a colaboradores, a su esposo y a su hijo en sitios privilegiados, para que llegaran al congreso federal sin ningún esfuerzo, ni mérito.

Su más reciente jugada política es que designa al diputado federal Marco Antonio Mendoza Bustamante, como coordinador general de campaña. Un joven con buenas cartas credenciales en la estrategia, pero también hay que decir que el diputado suplente del flamante coordinador es el hijo de Viggiano.

De tal suerte que la maniobra no se encamina a un pensamiento estratégico. Más bien está diseñada para quitar al titular para que el suplente (hijo de Carolina se quede con la curul). Perderán la elección, pero tendrán a toda su familia (esposo, hijo y ella misma en el Congreso Federal, no suena tan mal).

Por último, Viggiano ha enfatizado en estos días que es el tiempo de las mujeres. Eso es cierto, muchas de ellas se distinguen de la actual secretaria general del PRI, porque no vienen de posiciones de privilegio. Son madres trabajadoras que se ganan la vida todos los días. A ellas no les tocó la fortuna de casarse con un ex gobernador. Uno que por cierto, es investigado por la Fiscalía General de la República, por un presunto gasto ilegal de 400 millones de pesos.

2010_enrique

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