Propietarios de restaurantes y de taquerías, comentaron que la mayoría de los comensales evitan comer carne de res, ante el temor de que esté contaminada.
Celerino Luqueño Candia, empresario de este giro comercial, comentó que aunque existen otras opciones en el menú, la demanda de este tipo de alimentos, en sus diferentes modalidades, ha disminuido en más del 50 por ciento.
Óscar Hernández, quien también se dedica a este giro, indicó que inspectores de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Hidalgo (COPRISEH), han recomendado mostrar a los consumidores el ticket de compra de la carne de res; sin embargo, prevalece esta desconfianza.
El regidor Isidro Millán, quien tiene a su cargo la comisión de Servicios Municipales, puntualizó que la carne que llega al rastro de Tulancingo, es confiable e indicó que fue incinerado el ganado supuestamente contaminado, por lo que ya no existen riesgos para el consumo.
Agregó que es evidente, que esta situación tuvo una repercusión en el consumo de la carne de res, tanto en fondas, merenderos y taquerías.
Luis Alberto Mercado Hernández, responsable de la COPRISEH, dio a conocer que mantienen la vigilancia en los establecimientos de comida, con la finalidad de descartar alguna posible contaminación de la carne de res, sin que, hasta el momento, hayan detectado alguna anomalía
