La Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), informó que en lo que va de la administración del gobernador Julio Menchaca Salazar, las autoridades han decomisado alrededor de 500 armas, las cuales fueron confiscadas en Cuautepec de Hinojosa, Valle del Mezquital y Tula, principalmente.
Se explicó que mucho del armamento incautado, corresponde a ejemplares de “alto calibre” KS-23, cuerno de chivo y armas cortas.
De acuerdo a las matrículas y a las pruebas periciales realizadas en la Fiscalía General de Justicia (FGR) y la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH), las armas decomisadas en la entidad, provienen principalmente de Estados Unidos.
“Alguna que otra (arma de procedencia israelí), pero principalmente americanas”, aseguró la dependencia.
“Se ha tenido las cifras más importantes de decomiso de armamento que le hemos dado a conocer siempre cuando ha sucedido”, se dijo. De acuerdo a la dependencia, el mayor decomiso ha sido en Cuautepec de Hinojosa, donde hubo una acción para incautaron más de 20 armas en conjunto, con integrantes de la Secretaría Defensa Nacional (Sedena) y de la GN.
“Y así constantemente hemos ido a aseguramientos por el Valle Mezquital, en Tula, que es importante los decomisos”, se indicó.
Finalmente, la dependencia dijo que trabajan coordinadamente con el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional (GN) y con los municipios.
Respecto a la indagatoria a la Unidad de Medidas Cautelares (Umeca) por el caso Rosaura, joven que fuera asesinada por su expareja el 5 febrero pasado, la secretaria advirtió que no observa responsabilidad de Seguridad Pública Estatal en la aplicación de las medidas de protección que tenía la víctima.
“Se ha cumplido con el requerimiento que ha dado la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo, no hay ninguna anomalía, la Unidad de Asuntos Internos también llevó su investigación, y no ha arrojado alguna responsabilidad al momento”, especificó la dependencia.
