Hace unas cuantas horas el futbol español de primera división tiene tres nuevos equipos que participarán en la Liga EA SPORTS 2025-26. El Levante, el Elche y el Real Oviedo han ascendido a la primera división del futbol profesional de ese país. A diferencia de nuestro torneo allá en España sí se cuenta con el ascenso y descenso de las tres categorías principales. Religiosamente “suben y bajan” escuadras cuyos números exitosos les dan el derecho de ascender; en contraparte si no fueron competitivos caen a la segunda y tercera divisiones.

Después de 24 largos años, uno de los equipos del Principado de Asturias ha ascendido a la primera división profesional al comando de un grupo de inversionistas mexicanos. También son propietarios de acciones del club aficionados de Asturias y de 27 diferentes países que acudieron al llamado para salvar al club en el año 2012 en que estuvo al borde de la quiebra. Fue el inicio de esta aventura mexicana en que las empresas de Carlos Slim Helú y Jesús Martínez Patiño apostaron por invertir en una de las ligas más competitivas y caras del mundo.

Arturo Elías Ayub, miembro del Consejo de Administración de Grupo Carso y directivo en Inbursa, Telmex, Telcel, América Móvil y Claro Sports; directivo también de la Fundación Telmex entre otras empresas y asociaciones había ya tenido experiencia como dirigente del futbol. Fue un exitoso presidente de los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México de 2001 a 2004. Mas tarde lo haría en el Club León del que también tenía acciones el grupo Carso. En el 2003 dirigió a Pumas el penta-pichichi mexicano Hugo Sánchez y armó un equipazo en el Pedregal que logró el único bicampeonato durante algunos años. Más tarde el directivo del club “donde la vida no vale nada” también logró el bicampeonato con la presencia del otro gran jugador mexicano Rafael Márquez repatriado después de haber alzado la orejona en 2006 y 2009 con el mejor Barcelona de la historia. Arturo Elías puede presumir dos de los cuatro bicampeonatos de la era moderna en México ya sea presidiendo, dirigiendo o asesorando como parte del equipo de los llamados de “pantalón largo”.

Cuenta Arturo Elías que un sábado muy de mañana recibe una llamada de Emilio Butrageño, a quien había tratado a propósito del trofeo Santiago Bernabeú que disputaron el Real Madrid y los Pumas de la UNAM. Confiado en que podía ser el “Buitre” quien llamaba continuó la conversación que se estaba generando desde una estación de radio española. Bromeaban los radiodifusores con personajes a los que sorprendían a través de un imitador muy capaz. Tan capaz que después de simular la voz de Emilio, le pasó a “Hugo Sánchez” y a “Ronaldo” la bestia brasileña. Seguras las partes de que había sido una broma el locutor del programa español le confió a Elías Ayub que estaban apoyando una campaña que llamaron “SOS salvemos al Oviedo” que en ese momento estaba a un tris de desaparecer en la tercera división.

La campaña SOS estaba “pasando la charola” a los aficionados vendiendo acciones del Real Oviedo a diez euros cada una. Arturo compró diez acciones y preguntó cuál era la situación. Las deudas del equipo estaban a punto de ahorcarlo por ello este llamado urgente a la afición. Confiesa Arturo que desconocía incluso la ubicación geográfica de Oviedo. Le revelaron lo fiel que era esa afición y le retaron a abrir su cuenta de tweeter para comprobarlo. Recibió en unas horas diez mil mensajes que le permitieron reconocer la fidelidad de una población alarmada que veía a su equipo descendido a segunda y a tercera después de muchos años en primera. Su escuadra estaba a un paso del entierro. Las benditas redes sociales aún no detonaban en millones de seguidores, 10 mil era un mundo en esa época.

El lunes siguiente en la cena que acostumbra la familia Slim celebrar cada semana Arturo contó la anécdota. Los diez mil mensajes le mostraron la inusitada fidelidad de la tribuna. “Una afición así no debe morir” le dijo el Ingeniero y patriarca. “Arriésgate” le sugirió a su yerno. Se inició la ruta financiera para obtener el 70 por ciento de la propiedad del Real Oviedo. La campaña SOS generó accionistas por todo el orbe. Grupo Carso se hizo cargo de las deudas e invirtió lo necesario para que el equipo de tercera ascendiera a segunda en tan sólo tres años. “Ojalá pronto regresemos a primera” suspiraba Arturo Elías. Casi se logró en dos ocasiones. Su vecino y archirrival el Sporting de Gijón aún sigue en segunda. La mayoría accionaria de ese equipo también está en manos mexicanas desde 2022 a través del polémico Grupo Orlegi encabezado por Alejandro Irarragorri.

Se requería para lograr el brinco a primera de una estructura y una experiencia en el negocio de las patadas que CARSO no tenía así que se le propuso a su socio en México de los equipos Pachuca y León hacerse cargo del Real Oviedo ya en segunda. La familia Martínez Murguía aceptó el reto -es el ascenso más difícil de todas las ligas del mundo ha dicho Jesús Martínez Patiño en entrevista con el periodista Ciro Gómez temporalmente en Madrid-, y apostó invirtiendo por la mayoría accionaria. Llevó piernas frescas y respaldó a los históricos para lograr el anhelado ascenso. El presidente deportivo del propio Pachuca Martín Peláez emigró a hacerse cargo del Oviedo. Se espera que puedan también concursar en las ligas de Europa; el Mundial de Clubes; y la joya de todas las coronas: la Champions.

Jesús Martínez padre, Presidente del Grupo empresarial hidalguense ha explicado en recientes entrevistas su modelo de negocios: comprar sólo equipos de segunda división y buscar su ascenso deportivo que automáticamente se traduce en éxito financiero además de una verdadera integración con la comunidad. Ya lo han logrado con cinco equipos en cuatro ligas: compraron al gobierno de Hidalgo al Pachuca de la segunda división mexicana cuando aún se respetaba el ascenso. Lo llevaron primero a primera y después lo hicieron campeón nada menos que con Javier Aguirre, actual seleccionador al timón en ese año 1999. Compraron al León de segunda a empresarios de Guanajuato y también lo ascendieron con el comando de Jesús Martínez Murguía, hijo del presidente del grupo y de Gabriela Murguía rectora de la Universidad del Futbol y responsable de la parte social de las empresas y proyectos del Grupo Pachuca. Durante la sociedad con el consorcio del ingeniero Slim hicieron bicampeón a la “Fiera” también conocido como “los Panzas Verdes” del Cinco Copas, la “Tota” Carbajal. En 2012 se logró el ascenso a la primera división. En 2013 fueron campeones. Un torneo después se logra el segundo bicampeonato en México. Sólo Pumas lo había hecho en torneos cortos. El León fue el primero en lograrlo en torneos largos y en torneos cortos. Recientemente por cierto, la FIFA le arrebató el derecho a jugar en el Mundial de Clubes, hoy en desarrollo. Martínez Patiño se lo reclamó airadamente a Giovanni Vicenzo Infantino cuando se sentaron hombro con hombro el domingo pasado en el Pachuca vs Real Madrid.

En el año 2016 el grupo de Jesús Martínez se hizo del 80% de las acciones del equipo Everton chileno de la bellísima Viña del Mar, privilegiando la participación de canteranos. En 2019 compraron el 20% restante. Hicieron lo propio con el Talleres argentino a través de su actual Presidente el cordobés Andrés Fassi de larga estancia en México, asociado con “Chucho” Martínez.

 Hoy por quinta vez han logrado ascender a un club de segunda que ya es de nuevo de primera:  el Real Oviedo justo en su centenario con un entrenador y ex jugador que sufrió el descenso del año 2000. Se trata del serbio Veljko Paunovic que llevara hace poco a las Chivas de Guadalajara a una final en 2023. Se dice que los jugadores poderosos de los Tigres de la UANL (en realidad de la cementera Cemex) lo sacaron de fea manera apenas en el pasado mes de marzo. Grupo Pachuca lo cachó y lo llevó a lograr la gran afrenta de ascender como técnico con el mismo equipo que bajó a segunda hace casi 25 años. Hace muchos ayeres José Manuel “Chepo” de la Torre de la dinastía deportiva de esa familia jalisciense jugó algunos partidos con el Oviedo sin mayor impacto. Cuando apenas se estaba aclimatando el Rebaño Sagrado lo repatrió -a disgusto del joven delantero- para su venta en México.

En los lejanos años 30´s del siglo pasado hubo un jugadorazo que brilló en Oviedo antes de venir a jugar al Club Asturias de México como emigrante por la inminente guerra civil: Isidro Lángara Galarrága de dorada memoria aquí y allá donde obtuvo tres Pichichis con la llamada delantera eléctrica. Isidro es el máximo goleador del Oviedo. En México fue dos veces líder de goleo.

 Por cierto, el gran enemigo del club asturiano propiedad de mexicanos en un 75% será la cartera. Difícilmente podrá canalizar paisanos jovencitos y hoy también jovencitas, que hagan carrera en la primera española. Las limitaciones de jugadores no comunitarios y sobre todo los altos sueldos que se pagan en México harán imposible llevar a estrellas juveniles a Europa que antes que nada buscan cifras de varios ceros por calzarse los tachones. Eduardo Herrera Bueno “Herrerita” jugador histórico del Oviedo en los albores del siglo XX llegó a firmar su contrato en blanco para demostrar valor civil y compromiso como ejemplo para los jóvenes que se empezaban a integrar a las filas de “los carbayanes”. (El mote les fue impuesto a los naturales de Oviedo que toman el apodo de un viejo roble o carbayú situado frente al Teatro Campoamor).

Llamó la atención en las transmisiones de televisión generadas desde el estadio “Carlos Tartiere” (icónico primer presidente del club Real Oviedo producto de la fusión del Ovetense y el Deportivo en 1926). Las señales vistas desde las calles de la pequeña ciudad y desde el balcón del Ayuntamiento mostraban el muy buen comportamiento de los alegres aficionados. Al paso de sus rivales de tribuna se veía el don de gentes de los vencedores que aplaudían y consolaban a los aficionados del Mirandés que cargaron en sus espaldas la voltereta del 0-2 en el minuto 45 al 3-2 a favor de los de casa que les otorgó el preciado boleto a primera en los sufridos tiempos extras. Fair play genuino.

 Dicen las crónicas que participaron alrededor de 250 mil personas en el desfile de la victoria, y aunque se veían a muchos aficionados e incluso a los jugadores a bordo del camión del festejo con botes de cerveza Mahou en mano o Sidras El Gaitero a pico de botella, no hubo ningún disturbio relevante. Muchos portaban playeras con la leyenda: ¡yo no te abandoné cuando estabas en tercera! Personajes como el piloto Fernando Alonso o el cantautor Ramón Melendi Espina “Melendi” canterano ovetense que le compuso al piloto la pieza “El Nano” una vez electa la carrera de músico en vez de futbolista honrando al ex campeón mundial de la F1. Se le veía a ese par de asturianos pasear entre aficionados dejando brillar al “viejito” de cuarenta años Santiago “Santi” Cazorla o Nacho Vidal o al uruguayo-mexicano Viñas o a Portillo con el diez en su playera, que firmaban camisetas y balones; y saludaban a niños y jóvenes aficionadas y aficionadas que cada cierto tiempo entonaban porras y cantos, y de vez en cuando bailaban al ritmo de un DJ muy animoso. También honraron los aficionados la tranquilidad de una comunidad de escasos 300 mil habitantes que sólo se siente perturbada cuando llegan los Reyes y las Princesas españolas a reconocer los valores universales a través del Premio Princesa de Asturias en el Teatro Campoamor cada final de octubre.

Nunca mejor agendado el ascenso a primera que el inicio de los festejos por el centenario de la creación de este club de futbol tan representativo del Principado de Asturias. La fecha exacta de la creación del Oviedo es el 26 de marzo del 2026. Sería genial que estuvieran tan bien colocados que podrían participar en esos torneos estelares que además de darles el prestigio deportivo, les permita fortalecer también las finanzas que alguna vez estuvieron a un paso de la desaparición. Aquí en México, sede de un tercer Campeonato Mundial -hecho inédito- con un estadio Azteca o Banorte ahora remodelado y a un año de dar el silbatazo inicial de un partido inaugural por tercera ocasión, se puede decir aquello de “en casa del herrero cuchillo de palo”. Aquí no hay ascenso por capricho, pero sobre todo por ignorancia de que es buena estrategia financiera de mediano plazo. Lo que sí hay en México es una comunidad asturiana muy viva con raíces desde la migración producto de una guerra civil que cimbró a las dos Españas de entonces y nos trajo talentos y esforzados asturianos muy trabajadores y decentes como lo son todas las migraciones en todo el globo terráqueo. Enhorabuena por el Real Oviedo que por cierto recibirá el 14 de octubre  el Premio Iberoamericano de Deporte 2025 que le entregará la Asociación  Iberoamericana de la Comunicación. ¡Hala Oviedo que ya son de primera!

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