Hace una semana iniciaron en el Congreso del Estado de Hidalgo, las comparecencias de las y los secretarios de estado. En este marco, los funcionarios acuden a dicha soberanía para ampliar el estado que guarda su área de competencia en la administración pública.
Ahí se ha visto de todo, secretarios que dominan su tema con buena retórica, otros que se respaldan de datos técnicos por la naturaleza de sus funciones, unos más que combinan dichos elementos, en fin. El ejercicio de rendición de cuentas, ha resultado favorable para el gobierno y para la sociedad.
En este sentido, es importante subrayar que el debate ha sido intenso y provechoso. Los funcionarios no han acudido a un “día de campo”, debido a que los representantes populares han cuestionado con firmeza sus acciones y decisiones.
Quizá, en un primer momento, reinó el escepticismo de que una administración estatal que llegó con un sello político, no sería cuestionada por la mayoría legislativa que tiene ese mismo partido. Pero, por el contrario, hemos sido testigos de un buen debate que habla bien de la madurez política de ambos poderes.
Resaltar, incluso, que algunos secretarios han sido fuertemente cuestionados y se han reconocido errores y aciertos, que todas las personas dedicadas al servicio público pueden cometer. Es decir, es válido equivocarse, pero lo que debemos erradicar es esa complicidad que se dio en otros momentos, donde las cosas funcionaban en una esfera de complicidades.
En otras palabras, funcionarios no eran cuestionados para guardar ciertas formas políticas y tratar de no incomodar a nadie. Aunque eso generaba la percepción de tranquilidad y pleno control del escenario público por parte del gobierno, lo cierto es que se trataba de un armado en donde convenía mejor el silencio.
Lo que hemos vivido en estos días, es un sano ejercicio de intercambio de opiniones y de profundización de temas de la administración pública, donde todas y todos aprovechan la oportunidad para cuestionar con libertad.
Estas comparecencias sirven para generar más canales de comunicación entre poderes, pero también entre personas. Ojalá que se construyen y fortalezcan más vías de intercambio de opinión y debate. Esto nutre la democracia local y consolida la división de poderes.
La disertación de temas de interés público, siempre suma en positivo. Debemos de fomentar estos espacios porque lo que pasa en las instituciones del Estado, nos compete a todos. Tarde a temprano lo que se decida ahí, afectará en nuestra vida cotidiana.
En una semana concluyen estas comparecencias y viene la aprobación del paquete económico. Es decir, la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos para el 2026. Con ese mismo ánimo los legisladores deberían de discutir la pertinencia del mismo, pensando en el bienestar de los hidalguenses.
Seguramente así será con los 75 mil 343 millones 96 mil 742 pesos, que contempla el paquete económico, es decir, un crecimiento del 6.1 por ciento en relación con los 71 mil 39 millones 555 mil 296 pesos aprobados para este año.
Esperemos otro gran debate en este particular y que el Congreso siga dando nota de parlamento plural y respetuoso, en la discusión de los temas torales para el estado de Hidalgo.
