El caos vehicular se ha vuelto la norma en la calle Francisco Mendoza de la colonia Medias Tierras, donde la ciudadanía exige la intervención inmediata de la Dirección de Tránsito Municipal. El problema central es el estacionamiento en doble fila, una práctica recurrente a pesar de la clara señalética instalada que prohíbe aparcar.
La calle Francisco Mendoza es considerada un punto vial “pesado”, debido a la alta concentración de establecimientos que atraen un flujo constante de vehículos y peatones.
En dicho tramo, convergen una escuela primaria particular, un taller mecánico, un templo religioso y un salón de fiestas.
A pesar de que las autoridades han visitado la zona y colocados señalamientos, los conductores simplemente hacen caso omiso.
“Es una burla que se estacionen justo debajo del anuncio de no estacionarse que puso presidencia,” expresó una vecina afectada, destacando el franco desacato de los automovilistas a las normativas viales.
El tráfico se intensifica considerablemente durante las horas pico de salida de los escolares, poniendo en riesgo la seguridad de los menores. La situación empeora dramáticamente los fines de semana con la actividad del salón de fiestas, momento en que el estacionamiento en doble fila se vuelve incontrolable.
Ante este panorama de riesgo y constante embotellamiento, los vecinos de Medias Tierras demandan que la autoridad implemente rondines de vigilancia permanentes y aplique sanciones. Su objetivo es disuadir a los infractores y recuperar la fluidez y seguridad de la calle.
