El dirigente de la Sociedad Ecologista Hidalguense, Marco Antonio Moreno Gaytán, lamentó que la Secretaría del Medio Ambiente permanezca omisa ante la degradación ambiental que sufre el estado, así como en la defensa del entorno natural.
Hasta el momento, señaló, las acciones emprendidas han sido débiles e insuficientes. Por ello, Hidalgo enfrenta actualmente uno de los problemas ambientales más severos del país, que no se limita a un solo aspecto, sino que incluye la degradación del suelo, el aire y el agua.
Resaltó que la ineficiencia en este sector es evidente con la problemática que atraviesan más de 8,000 hectáreas de bosque afectadas por plagas y tala clandestina, sin que exista un proyecto bien definido para atender ambas crisis.
En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, expuso que la ausencia de programas ambientales ha generado un impacto negativo generalizado: en algunos sitios hay escasez de agua, en otros, deterioro del suelo, y en varios más, contaminación del aire. Incluso, en ciertas zonas del estado, las tres problemáticas se concentran.
El activista subrayó que la sociedad civil ha hecho constantes llamados a las autoridades estatales; sin embargo, estas han mostrado un abandono sistemático de los temas ambientales, por lo que no existe una estrategia clara para proteger el ecosistema hidalguense.
Moreno Gaytán indicó que desde hace tiempo se ha solicitado la construcción de una agenda con soluciones reales, para revertir las condiciones de abandono que imperan en la entidad.
No obstante, lamentó, hay oídos sordos tanto en la Secretaría del Medio Ambiente como en las instituciones encargadas del rubro.
Finalmente, recalcó que sólo el 5 % del Producto Interno Bruto (PIB) nacional se destina al medio ambiente, y aunque esta cifra se repite como discurso oficial, los recursos podrían ser realmente útiles si existieran proyectos serios o si se creara un fideicomiso enfocado en la restauración y conservación ecológica.
