La diputada federal de Morena, Tatiana Ángeles, garantizó que los campesinos de Hidalgo no se quedarán sin agua, luego de que se aprobara la Ley Nacional de Aguas, la cual busca devolver al Estado la rectoría y regulación de este recurso.
Señaló que con esta ley, se tocaron intereses importantes tanto de empresarios como de políticos, quienes dijo, aprovecharon a grupos de transportistas y del sector agrícola, para manifestar una inconformidad, que no está dirigida a afectar a estos sectores.
Precisó que la Ley de Aguas tiene como objetivo, regularizar las concesiones y que el control del agua, que en su mayoría estaba en manos de particulares, pase a la población y se distribuya de manera más equitativa.
En el caso de Hidalgo, indicó que el agua residual que llega al estado será tratada, por lo que se tienen proyectadas tres plantas tratadoras adicionales.
Agregó que se revestirán canales para evitar la pérdida del líquido y que también se trabaja en un programa de mejoramiento en el uso del agua para riego. De esta manera, señaló que si bien el agua tratada se distribuirá inicialmente en las zonas de Hidalgo que no cuentan con riego, también llegará a otros estados.
Sin embargo, aclaró que esto no significa que los campesinos vayan a sufrir una pérdida de volumen.
Señaló que esta situación se compensará al evitar la filtración provocada por el azolve de canales y canaletas, además de que se avanza en la tecnificación del campo, lo que permitirá que las parcelas utilicen menos agua para el riego.
El objetivo, dijo, es recuperar el volumen de agua que se pierde y redirigirlo a las regiones que enfrentan escasez, sin afectar el suministro que actualmente utilizan los productores.
La legisladora explicó que durante la discusión de la Ley de Aguas Nacionales, se alcanzó un punto medio, en el que el sector productivo defendió su postura y los legisladores cedieron en algunos aspectos, como en el tema de la punibilidad, ya que solo se contemplarán faltas administrativas para quienes enfrenten señalamientos por apropiación indebida de agua.
Tatiana Ángeles también destacó que con la recuperación por parte del Estado de la rectoría en la regularización del agua se busca una distribución más equitativa, ya que este recurso es un derecho humano y debe contar con reglas para su uso racional. Incluso, señaló que en algunos casos, se detectó que quienes acaparaban concesiones vendían el líquido a las comunidades.
