En Huejutla el gobernador Julio Menchaca estuvo en la sede de una de las fiestas más importantes de Hidalgo: El Xantolo, suspendido por dos años por la pandemia del Covid-19.
Dijo que la conmemoración del Día de Muertos no sólo es una reactivación económica del estado, sino es una oportunidad para que los hidalguenses disfruten las tradiciones y costumbres de esta celebración.
Acompañado de su esposa Edda Vite, presidenta del Patronato del Sistema DIF Hidalgo y del alcalde, el gobernador recorrió el Sendero de Luz y posteriormente un ritual de purificación, con lo que se honra la memoria de niños y niñas.
Al trasladarse a la Plaza 21 de Mayo se hizo el ritual correspondiente a una casa tradicional, donde los invitados fueron recibidos con ofrendas, incienso y música.
En el campo santo de la iglesia, la comitiva escuchó la explicación que el escenario colocado en el atrio de la catedral, es una muestra de respeto a las almas de los cuerpos que descansan en el lugar.
El Xantolo es una tradición con raíces prehispánicas reculturizada con innovaciones hispanas, lo que la torna mestiza, ya que los conquistadores españoles e indígenas no solamente mezclaron sus genes, sino también sus religiones y creencias
