Nuevamente queremos rendir homenaje al árbol, ente que es un verdadero regalo de la naturaleza y que tantos beneficios proporcionan a la vida de este planeta, el árbol que en conjunto constituyen los pulmones de la tierra.

    El día 28 de julio se celebra el Día Internacional del Árbol y fue establecido por el Congreso Forestal Mundial en 1969 en la ciudad de Roma, con el fin de recordar la importancia de proteger las superficies arboladas.

   Los árboles aportan importantes beneficios ecológicos, proveen de sombra en épocas de calor, evitan la temible desertificación, detienen la erosión, minimizan los riesgos de inundación, absorben co2, suministran oxígeno además de embellecer ciudades, carreteras, playas, montañas y múltiples lugares.

      En México se celebra El Día del árbol el 11 de julio, pero en realidad es el día en que recordamos que en México se pierden 600 mil hectáreas cada año, que en pueblos y ciudades se talan los árboles de jardines, calles, caminos y camellones, como siempre no hay nada que celebrar.

    Una de las consecuencias más graves por la destrucción de bosques y selvas están la reducción en el abastecimiento de agua:

      “La deforestación conlleva una drástica disminución en el suministro de agua a escala local y nacional. Así mismo rompe el equilibrio climático a nivel regional e incluso planetario, lo cual exacerba la amenaza que representa el cambio climático global.” GREENPEACE

       El municipio de Tulancingo se está quedando sin árboles, por un lado, cada año se anuncian reforestaciones de muy pequeñas proporciones por la presidencia municipal y por otro, se dan mayormente permisos a particulares para el derribo de árboles, no hay políticas, ni campañas para su conservación. Cada administración se culpa a los árboles de constituir un peligro para paseantes y peatones, pero no son estos, se debe al mal mantenimiento; desde la plantación en espacios poco adecuados, especies no aptas para el lugar, podas malhechas.

Hace 200 años el tema de los árboles y las riquezas naturales en Tulancingo, fue informado por los estudiosos como Barón Humboldt, anteriormente a los árboles se les daba la importancia que estos merecen.

   Los árboles por su belleza son fuente de inspiración para artistas, escritores y poetas como el siguiente poema:

En el árbol, luce el nido, vida en flor;

y su sombra es el abrigo del cansado caminante,

 fatigado por el sol.

Da su fruto, tanto al pobre como al rico,  

al esclavo y al señor,

Y aunque a golpe de hacha herido,

luz y fuego da su tronco al leñador.

Pero el árbol se ennoblece en esencia y potencia,

 en belleza y amor, cuando ofrece su madera:

para la asta a la bandera, para la cruz al redentor.”

                                                                 Antonio Álamo

 Podemos decir que aun somos afortunados de tenerlos, admirarlos y valorarlos porque sin ellos estaría el fin, sería bueno que entre nuestros proyectos plantáramos más árboles. Hasta el próximo viernes.       

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