Durante las últimas cuatro semanas por lo menos cinco microbuses que cubren la ruta Tulancingo-Rincones de la Hacienda, han sido apedreados por manos anónimas, de acuerdo con testimonios de operadores de la línea SUCSA.
Afectados dijeron a Ruta que, por lo general, este tipo de actos vandálicos ocurren a la altura de un conocido negocio de autopartes, principalmente por las noches, entre las 20:30 y 21:30 horas.
“Nos han quebrado parabrisas y la verdad estamos expuestos a un accidente, incluso a que alguno de los pasajeros resulte lesionado”.
Uno de los entrevistados, comentó que han logrado identificar a unos jóvenes, entre ellos a una mujer, como presuntos agresores.
No descartan, dijo, que sean algunos limpia parabrisas a quienes anteriormente les daban “aventón”, pero desde que les cobran, se molestaron.
Apolinar Ávila González, dirigente de la Confederación de Transportistas Metropolitanos del Valle de Tulancingo, dijo que ante tal situación han solicitado apoyo tanto a la Policía Estatal como a la dirección de Seguridad Pública, para evitar que algún pasajero u operador resulten lesionados, al quebrar los cristales de las unidades con las piedras.
Mencionó que de acuerdo con los reportes, estos casos ocurren en la entrada de la colonia Rincones de la Hacienda, donde no hay casas y colectivas circulan a baja velocidad, debido al mal estado de la carretera

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