El secretario de Seguridad Ciudadana, Rafael Guerrero Gómez, anunció que implementarán operativos para retirar de los cruceros a los “lanzafuegos” o “tragafuegos”, ya que constituyen un riesgo para los automovilistas.
“En Tulancingo, por fortuna, no se han registrado incidentes, pero prevalece el riesgo de que alguna gota de combustible o por la cercanía, pueda generar algún accidente”.
Guerrero Gómez, puntualizó que el peligro es también para las personas que se dedican a esta actividad y estimó que en Tulancingo existen por lo menos siete “tragafuegos”, aunque el número puede ser variable, pero con tendencia al alza y lejos de representar un espectáculo, se vislumbra como un problema de salud.
Jorge Rivera, director de Reglamentos, comentó que cuando parece que acceden a la petición de las autoridades para que se retiren, regresan horas más tarde y prácticamente, se vuelve un círculo vicioso.
Los “tragafuegos”, tienen que echarse una bocanada de gasolina o diésel, en ocasiones una poca porción se les pasa al estómago. Al soplar, se les queman los vellos de las fosas nasales, también pueden sufrir lesiones en el paladar y la lengua, al inhalar el fuego.
Los combustibles que utilizan son tóxicos, además de que están expuestos a quemaduras que pueden ser hasta de tercer grado

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